El milagro del Nacimiento: Children of Men

Un futuro sin niños. Un futuro donde los inmigrantes ilegales son encerrados en campos de concentración. Un futuro en el que el terrorismo es el pan nuestro de cada día. Un futuro en el que los mensajes fascistas están camuflados como simples anuncios luminosos. Un ¿futuro?.

Este es el panorama que nos presenta la ultima película del mejicano Alfonso Cuarón (esta claro este año se lo llevan todo los mejicanos esta misma, “El Laberinto del Fauno”, “Babel”…). “Los Hijos de lo hombres” (Children of Men) es una de esas que hace que se te encoja el corazón. El tema no es para menos, en un futuro a la vuelta de la esquina ya no nacen más niños y el hombre más joven es asesinado en Buenos Aires porque se niega a dar un autógrafo (insertar chiste de argentinos). Además Cuarón sabe sacarle todo el partido posible, introduciendo todo tipo de detalles (ese cerdo colgado de la fabrica a lo Pink Floyd hizo que se me saltaran las lagrimas por primera vez durante la película, luego repetiría varias veces), dando todos los matices posibles, dotándola de un sentido del humor genial y convirtiéndola casi al final en una película de terror. Porque si tengo que decir a que genero pertenece “Los Hijos de lo Hombres” os diría que es un thriller de ciencia ficción honesto, sin alardes tecnológicos ni naves espaciales. Y también que es un drama, y a ratos una de acción y en algunos momentos una de terror. Y siempre jugando limpio con el espectador ni siquiera cuando tiene sus momentos más “dulces” se deja llevar por la sensiblería, un segundo antes de que el espectador piense que ya es suficiente Cuarón nos sacude una patada en la cara para que no nos confiemos. Consigue que queramos a esos personajes en esa huida desesperada hacia un “mañana” mejor.

Y parte de la culpa también la tiene Clive Owen que nunca estuvo tan cínico y tan cool que desprende carisma por los poros. Apoyado a la perfección por un montón de secundarios de lujo como Michael Caine, Julianne Moore o Peter Mullan. Y no puedo dejar de pensar en como habría sido este material si hubiera caído en otras manos. Ni seria tan entretenida, ni sería tan dura, ni sería tan critica y desde luego no seria tan buena. Una de las películas del año sin duda.