jueves, agosto 24, 2006

Alatriste


"1582, el sol no se ponía en nuestro imperio", eso cantaban ironicamnete los Nikis hace unos años y esa es la epoca que retrata el "Alatriste" de Agustín Diaz Yanes. Una epoca violenta y desesperada en la que España dominaba el mundo y sin embargo no tenía ni para pagar los sueldos de los soldados de su ejercito. Una epoca donde la Inquisición campaba a sus anchas por Europa y la vida de un hombre valía más bien poco. Una epoca que recrea Yanes con gran maestria, desde esa rendición de Breda "viva" imagen del cuadro de Velazquez hasta las costumbres de la epoca. Una recreación tan perfecta que quizas se deja por el camino un poco de la emoción y de la tensión que debería tener la historia. Una historia de aventuras como la de Alatriste deberia hacernos vibrar, saltar en la butaca y no lo hace.
Parte del problema es el guión que no lleva una linea clara. Al no seguir ninguna de las novelas, sino que intenta ser un compendio de varias, econozco que un servidor llevaba una hora de película y todavia no sabía de que iba a ir la historia. Mucha información, muchas tramas que no acaban de cerrar en condiciones (¿porque ese Bocanegra de la inquisición quiere acabar con los ingleses?). Otro problema es el esmero que ha puesto Díaz Yanes en cuidar el espiritu de la epoca (por cierto nada glamurosa como otras veces se nos ha presentado) y lo poco que se ha preocupado por que el publico se interese más por la historia. Es posible que Yanes se maneje mejor en historias más intimas como en su mitica primera cinta "Nadie Hablara de Nostras cuando hayamos muerto".
Y el gran problema, sin duda, es Viggo Mortensen. Viggo es el perfecto Alatriste cuando camina, pelea con la espada o se quita el sombrero y sonrie pero la caga estrepitosamente cuando abre la bocaza y le sale ese acento imposible que cuesta trabajo de entender. Y es una pena porque podía haber sido una gran película. Las escenas de batallas son estupendas (bastante sangrientas en algunos momentos), así como esa otra en la que el Conde Duque de Olivares (un magnifico Javier Cámara) interroga al capitan Alatriste. Sin embargo se queda corta o sosa en las castas escenas de cama entre Ariadna Gil y Mortensen, sin que tampoco se vea mucha quimica entre los dos. Menos mal que la otra historia de amor, la del joven Iñigo y Angelica funciona mucho mejor, Unax Ugalde y Elena Anaya, se lucen en sus respectivos personajes. Tambien lo hace Antonio Dechent con ese mercenario amigo de Alatriste (que Dechent se luzca tampoco es una novedad). Es una pena, digo, porque es una buena pelí pero podia haber sido mucho mejor.
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